sábado, 13 de junio de 2015

Burbano y Elías: No es lo mismo y eso es lo mejor.




A León le viene faltando desde hace tiempo un jugador con desborde que pueda dar más electricidad al equipo  y atacar directamente a portería. Al parecer muchos aficionados ya olvidaron lo que es Burbano y creen que ya se tiene un elemento de desborde como es Elías Hernández. 

A continuación, las virtudes de Burbano y sus diferencias con Elías para que se note que pueden jugar en el mismo XI y que sus virtudes son diferentes.

BURBANO:
-          Su regate se basa en la velocidad. Ataca espacios y gana el carril a la defensa en el sprint.
-          Es ideal para el contragolpe.
-          Posee una gran técnica para colocar el centro sobre la marcha, es decir, pegarle en carrera.
-          Pese a su electricidad, es un jugador inteligente y que tiene también la pausa para elegir un pase raso al carril central.
-          Su técnica de pase es buena, es preciso, con la fuerza necesaria, rápido para ejecutarlo, sin importar que él o el receptor estén entre varios rivales.
-          Por lo mismo, es ideal para tomar a las defensas rivales recorriendo hacía atrás, sorprendiéndoles y no dándoles tiempo a acomodarse.
-          También puede atacar en velocidad directamente a portería y tiene gol.
-          Ya conoce el equipó, aportaría lo que ni la “Rata” Bravo ni Caicedo pudieron.
-          Puede ser un segunda punta muy móvil.
-          Sus centros activarían la opción de Boselli al primer palo y Gonzo Ríos al segundo.
-          Maneja ambos perfiles para pegarle a la pelota con naturalidad.
-          Juega mejor en la banda izquierda.

ELÍAS:
-          Es un jugador para posesiones largas, cuando el rival está metido dentro.
-          Su regate es en base a la habilidad. Enfrenta el rival y lo desborda.
-          Por lo mismo, la defensa rival tiene tiempo de acomodarse.
-          Son los compañeros los que deben moverse en el área esperando el servicio colgado.
-          Elías es imparable cuando encara, siempre desborda y centra.
-          Le pega excelente al balón parado, es clave en jugadas de estrategia como tiros de esquina y tiros libres.
-          Tiene un excelente juego de asociación, juego interior, puede tirar diagonales hacía adentro y tocar con sus compañeros para que la jugada progrese.
-          Juega mucho mejor en la banda derecha.

viernes, 12 de junio de 2015

La salida de Aris






Si hay una salida cuya explicación no puede ser deportiva, es la de “Aris” Hernández. El lateral izquierdo, historia viva del Club León (Marcó el gol de la victoria ante Querétaro en el regreso de la Fiera a Primera y cerró la final contra América) se va a las Chivas de Guadalajara, un equipo que en el nuevo milenio tiene más cambios de propietario que títulos. Más allá de la perdida sentimental, de un jugador que formaba parte de la gloriosa base que ha acompañado al Club León en sus éxitos de la presente década, Hernández es un lateral cuyas condiciones técnicas e interpretación del juego le hacen único en la Liga MX.

Marcado por la no llamada de un vengativo Miguel Herrera a la selección y por ende al Mundial donde un diestro ocupó el puesto de lateral izquierdo (!), a Hernández, como otros jugadores esmeraldas, se le abrió la opción de buscar equipos mediáticos para dar el salto al fútbol europeo o entrar en una convocatoria a la selección mexicana.

Sin embargo, tras una campaña donde la sombra del compromiso ensombreció la confianza de la afición en los jugadores y varios de ellos fueron señalados, el “Aris” parece ser uno de los que paga el plato en la confianza de Pizzi. Sería la única razón para que un equipo que mantiene sus mejores jugadores a costa de complicarse nuevos fichajes deje marchar a un jugador que valía bastante en los dos esquemas tácticos que uso Pizzi en el torneo pasado.

Cuando el Club León alcanzó su máximo nivel durante la era Pizzi (lo tuvo, no es broma) los laterales fueron fundamentales. “Fer” Navarro y “Aris” aportaban algo que está alcance de muy pocos jugadores de banda: juego interior. La zona de creación era muy visitada por los laterales, que ayudaban en la circulación y presionaban muy arriba. En realidad, sabían mantener la pelota con tranquilidad y esperar el momento justo para filtrar la pelota hacía Boselli o encontrar algún extremo. Intérpretes de calidad para la idea, ambos aportaron al equipo dos mediocampistas más en su juego, que además realizaban sus recorridos puntualmente y defendían adecuadamente. Si bien se Hernández se alejó del área y con ello la latencia de su peligrosa diagonal entrando al área para disparar, su peso en la liberación de Carlos Peña suponía un plus al equipo, en aquel León en el que Pizzi pedía a sus laterales que se alejen de la versión clásica de lateral pegado a la cal y en su lugar traten de arrancar a la misma altura que Peña y Vázquez, utilizando carriles interiores. El objetivo es que vayan de frente a la jugada, ofreciendo opciones para que circule la pelota pero también para que ellos mismos pueden tomar decisiones que terminen en situaciones de gol. Así, cuando toman la pelota, en la banda tienen una opción de pase para abrir el juego y en el horizonte otean a los delanteros que realizan movimientos de ruptura.

El problema llegó con el cambio de sistema, propiciado primero por expulsiones y lesiones y Hernández ya no se encontró más. La pérdida de confianza del equipo cayó en picada y la espalda del leonés se convirtió en autopista para el rival. El que haya durado sólo dos partidos aquel 4-4-2 que funcionó defensiva y ofensivamente explica mucho de la terrible campaña leonesa.

De cualquier manera, la realidad es que el aporte defensivo que pueda dar Velarde, el más apto para sumar en esa posición, será mayor, pero no podrá presentar las soluciones creativas, ni ofensivas ni la definición que tenía el jugador de Guadalajara. “Aris” por fin tendrá los reflectores, pero falta ver aún como funcionara en el equipo de un entrenador que suele limitar la aportación ofensiva de sus laterales y exige una mayor interpretación de defensa posicional que de ataque.

jueves, 11 de junio de 2015

PAULO DA SILVA




35 años 184 cm 84 Kg Diestro
Defensa Central.
Tres títulos de Liga con Toluca.
Jugó en Inglaterra y España.
Dos mundiales con Paraguay, subcampeón de la Copa América en 2011.


Se trata de un defensa central que actualmente ejerce como líbero en una línea de tres, como Cardozo hace jugar normalmente a Toluca. Por experiencia, le corresponde el liderazgo de la zaga. Carga encima una experiencia envidiable, pero también el peso de los años y eso se nota.

Las consecuencias de ambos conceptos son claras: la gran colocación y posición sobre el campo. Balones largos del rival, son pan comido. Gracias a su colocación y corpulencia, pues es fuerte y mantiene el peso acorde a su altura, no necesita saltar. Gana el lugar y regresa la pelota. Igualmente, posee un sentido único de los espacios a bloquear. Un sexto sentido que le hace recomponer la defensa si un compañero pierde la posición. Ahí es muy bueno y sabe también colocar el cuerpo para tapar disparos. Es muy difícil que pierda la posición y eso es un seguro cuando su equipo se ve reducido a defender en el límite de su área.

Sin embargo, ha perdido mucho de sus facultades físicas. Su capacidad de salto ya no le permite pelear centros colgados con los delanteros, sobre todo balones laterales. Así mismo, ahora es un jugador lento. Paulo lo sabe e intenta mantenerse dos metros lejos del delantero, para no perder en la carrera. Si el delantero recibe, entonces aprieta inmediatamente, usando su masa corporal para sacarlo de la jugada. Pero no suele ir al “cuerpo a cuerpo” u “hombro con hombro” por la desventaja que supone una diferencia de velocidad. No es ideal para presionar arriba al rival. En cuanto el contrario supera la línea de presión de su equipo, recula para conseguir la distancia con el delantero y arrastra consigo a la zaga, partiendo el equipo.

Con la pelota, es un cero a la izquierda. Busca el pase corto para evitar cualquier atisbo de salida. Y su trazo largo es impreciso. Si la pelota queda dividida, ya es ganancia, porque regularmente la da al contrario.

Qué le aporta a León
-Experiencia y liderazgo a una defensa huérfana desde la salida de Márquez
- Su perfil diestro es compatible con Nacho González.
- León batalla mucho por la coordinación defensiva. Paulo puede corregir eso y además, terminaría con los problemas de defensas que quieren salir a cortar.

Paulo no resuelve estos problemas:
-          La velocidad de la zaga.
-          La salida con balón y técnica de Rafa Márquez.
-          Si León sale a buscar el rival y no consigue quitar la pelota arriba, Paulo reculará y el equipo se partirá.

En suma, Paulo es un líder muy diferente a Márquez. Su fichaje significaría que el club se rinde en la búsqueda de un perfil parecido al del michoacano. Quizá junto a un central rápido y con buen juego o en una línea de tres sería útil, pero que suene pare el León significa una cosa: desesperación.

Diego Novaretti






9 de mayo de 1985
Altura 1,94
Pierna Derecha
Posiciones: Defensa Central, Mediocentro defensivo.
Campeón con Toluca.
Ha jugado en Italia.

Diego Novaretti es, ante todo, un jugador muy técnico. Es su cualidad diferencial para jugar como central, por encima incluso de su imponente estatura y a pesar de ella. Sus recepciones son limpias, con un control de la pelota que nunca se le escapa, y su golpeo de balón para el pase, ya sea raso o de botepronto, es preciso. Posee también una moderada visión que le permite encontrar al compañero en espacios reducidos, rápida y certeramente, incluso en situaciones de banda.  Con la pelota en los pies es muy paciente, nunca se desespera. Su tranquilidad deriva en clase y sabe tirar pases cortos pero diagonales: ideales para avanzar en grupo y encontrar al tercer hombre.

Evidentemente, su estatura le hace bueno por alto, parte con una ventaja natural. Sin embargo, no basa sus remates de cabeza en área contrario en su potencia, sino en su colocación y técnica. Encuentra la colocación donde la pelota puede caer y luego utiliza su cabeza más para dar colocación que para dar fuerza al remate, característica que comparte con Boselli. Sus remates a gol se basan en anticipar o moverse en busca del balón.

Defendiendo, utiliza su zancada y relativa velocidad para acercarse al rival y sacarle la pelota aprovechando la longitud de su pierna derecha, que es con la que patea y con la que ataca la posesión del rival.

En suma, hablamos de un defensa que supone un salto de calidad técnica a lo que ha sido la zaga del León desde la salida de Márquez. No tiene el trazo largo del michoacano, pero puede habilitar salidas mediante la conducción o jugarla ante la presión rival. Tiene características de mediocentro defensivo, lo cual supone una solución diferente a la búsqueda del club de un central que pueda saltar al mediocampo sin desentonar, tanto para cortar, robar o asociarse. Será incluso interesante, si llegará a falta Vázquez, verlo como mediocentro asociándose con Montes.
Es un fichaje ilusionante.